En
un
bosque
en
el
norte
de
Brasil, en
medio
de
una
vegetación
muy
hermosa
y
viva, hay
un
árbol
muy
grande. El
sol, que
sale
todos
los
días
observa
cómo
el
árbol
se pone viejo,
pues
ya
tiene
más
o
menos
123 años. Una
nube
le
pregunta: - ¿ Por
qué
estás
tan
triste?
El
árbol
responde: - Estoy
triste
porque
las
ardillas
ya
no
comen
de
mi
fruto, las
aves
no
hacen
nidos
en
mis
ramas
y
mis
hojas
caen
cada
día
más.
La
nube, preocupada
por
su
amigo, le
dice: - Si
quieres
voy
a
buscar
a
mis
amigas
y
juntas
te
traemos
el
agua
de
la
juventud.
El
árbol
acepta. Las
espera
mucho
tiempo
y
así
pasan
muchos
días, pero
las
nubes
no
llegan. Cansado
ya
de
esperar, el
árbol
se muere de
pie, como
todos
los
árboles.
Cuando
las
nubes
llegan
y
ven
que
es
muy
tarde
porque
su
amigo
ya
no
está
se ponen a
llorar. Y
de pronto, empiezan
a
nacer
nuevos
árboles.
Las
nubes
lloran
vida, y
es
a
este
llanto, al
que
llamamos
lluvia. FIN
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