Daniel(m): El
próximo
año
vamos
a
ser
marido
y
mujer. ¿Dónde
prefieres
vivir?
Alicia(f): Prefiero
una
casa
grande, para
recibir
invitados. Daniel: ¿Recibir
a
quién?
Alicia: A
mis
padres, mi
hermana, mi
cuñado, y
por
supuesto
a
mi
sobrinita.
Daniel: ¡Entonces
una
casa
muy
grande! Alicia: ¡Claro! Prefiero
casa
y
no
departamento, porque
no
quiero
subir
escaleras. En
una
casa
salgo
al
jardín, siento
el
canto
de
los
pájaros, veo
sonreír
a
nuestros
hijos.
Daniel: ¡¿Qué
dices?! Alicia: Yo
quiero
muchos
bebés, por lo menos cuatro.
Daniel: ¿En
serio? ¿No
me
mientes? Alicia: No
te
miento
y
te
pido
desde
ahora, quiero
abrir
una
fábrica
de
bebés.
Daniel: ¡Que
linda! Me
haces
reír Alicia: Pero
no
es
broma, mi
prima
Raquel tiene
tres
hijas
y
mi
tía
Sara tiene
dos
hijos
y
dos
hijas. Es
cuestión
de
familia.
Daniel: ¿Y
cómo
vas
a
dormir? Todas
las
madres
dicen
que
no
duermen
en
la
noche
por
los
bebés.
Alicia: ¡Ay, a propósito de
madres! Mi
mamá
viene
hoy Daniel: ¿Y
qué?
Alicia: ¡Como
siempre! No
mido
el
tiempo.¡ Me
tengo
que
vestir
y
no
tengo
nada
para
servir!
Daniel: Tranquila
Alicia, mi
suegra
es
simpática. Alicia: Sí, pero
siempre
dice
algo
cuando
va
a
casa
de
mi
hermano
y
su
nuera
no
sirve
nada.
Daniel: Tranquila, ahora
tú
te vistes, yo
la
recibo
mientras
tu
praparas algo.
Alicia: Gracias
mi
amor, voy
a
vivir
con
el
marido
ideal.
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