Algunas
veces
su
vida
dependerá
de
la
capacidad
que
desarrolle para
explicarse
en
cualquier
situación
en
la
que
se encuentre.
Llovía
con
gran
fuerza. Cuando
salía
del
garaje
en
su
auto, un
ejecutivo
vió a
su
linda
secretaria
en
la
parada
del
ómnibus. Paró
el
vehículo y
preguntó: - ¿La
llevo? -
¡Gracias! - respondió
ella
- subiendo al
auto. Cuando
llegaron
a
la
casa
de
la
joven, él
se
detuvo
para
que
bajase y
ella
lo
invitó
a
entrar. - ¿Quiere
tomar
un
café, un
whisky
o
alguna
otra
cosa? -
Nooooo, gracias, tengo
que
ir
a
casa... - Si, pero
Ud. fue
tan
amable
conmigo... suba
un
ratito, vamos...
Finalmente
el
ejecutivo
cedió
ante
la
invitación
de
la
chica. Una
vez
en
la
casa, tomaron
unos
tragos, una
cosa
fue
llevando a
la
otra
y
finalmente
se desencadenó lo
que
tenía
que
suceder... llegaron
al
dormitorio
en
un
arranque de
pasión.
Vencidos por
el
cansancio, sin
darse
cuenta
y
debido
a
que
el
encuentro
fue
tan
estupendo, ambos
se durmieron.
El
ejecutivo
se
despierta repentinamente, mira
confundido
a
su
alrededor
hasta
que
se
da
cuenta
de
la
situación... desesperado
mira
su
reloj
y
ve
que
marca
las
5:00 de
la
madrugada. Muy
nervioso
busca
su
teléfono
celular
y
llama
a
su
casa. Se
siente
que
alguien
toma
la
línea
del
otro
lado
y
sin
dar
tiempo
a
nada
el
ejecutivo
grita:
- ¡NO
PAGUEN EL
RESCATE
... ! ¡CONSEGUI FUGARME !
FIN
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